Luego de conocerse el hecho de robo en una vivienda ubicada en la intersección de calles Sarmiento y Ceballos, dialogamos con la damnificada la profesora María Eugenia Blangetti quien describió lo sucedido.
A las cinco de la madrugada de hoy jueves me despierta mi hija ya que había dos personas adentro de mi casa.
Avisé de inmediato a la policía y los sujetos iniciaron la retirada.
Yo estaba profundamente dormida y fue mi hija quien los observó.
En esta casa ya ingresaron a robar en muchas oportunidades, ya sea cuando estaba en obra, y en otras oportunidades sacando objetos del patio, pero nunca accedieron al interior de la vivienda.
En el barrio estamos sufriendo robos a diario. Hace un año nos reunimos con la policía en mi casa y hubo buena predisposición; y el problema es que van rotando los comisarios y tenemos un grupo de whatssap donde nos mantenemos comunicados diariamente.
La Municipalidad tomó cartas en el asunto e iluminó el sector y los robos son a diario.
En el grupo de emergencia los vecinos publican robos durante prácticamente toda la semana o les arrojan piedras.
Cuando mi hija se percató de la presencia de estos sujetos en la casa, envió un mensaje y los mismos vecinos llamaron al 101, pero no pudieron comunicarse y mi hija me llamó e hice la denuncia.
La policía se demoró ya que el episodio coincidió con el incendio en Mussian Canciani.
Al encender las luces, los sujetos escaparon por el tapial por donde ingresaron y mi hija alcanzó a ver su vestimenta.
Se llevaron dos computadoras de trabajo y mi billetera con dinero y documentación.