Gregorio Mandrini trabaja hace un mes para la Scudría Alpha Tauri y contó su historia de vida exclusiva para Carburando.
De un taller de Leones, Provincia de Córdoba, a la Fórmula Uno. Así, se podría resumir el crecimiento profesional de Gregorio Mandrini en los últimos años.
Hijo de Gustavo Mandrini, ex-piloto y preparador de autos de competición, a sus 25 años está haciendo realidad un sueño gracias al trabajo y la dedicación que puso en su actividad la mecánica en autos de competición.
Desde chico, Gregorio se interesó en los autos de carrera por su papá que competía en la Fórmula Renault Plus y tenía su propio equipo en la Fórmula Renault Plus. Estudié tecnicatura en mécanica y después el resto lo aprendí de mi viejo. Él empezó con los kartings y llegué a correr de los 4 años a los 9 años con los karts. Después también hice motocross de los 12 a los 16 años, pero lo que siempre me interesa fue la mécanica. Volvía del colegio y me ponía a jugar con las herramientas. Esa con el tiempo se fue transformando en un trabajo y en una actividad más profesional con el equipo GM Racing de mi papá, contó.
El 2012 llegó un golpe duro en lo personal su papá, Gustavo, falleció cuando el tenía solo 17 años. Tras eso, Gregorio se puso el equipo al hombro para la última fecha de la Fórmula Renault Plus, terminaron el campeonato y más adelante decidieron vender los autos y las partes del equipo.
Info: Carburando.