En diálogo con el equipo de la Red Panorama, el sub jefe de los Bomberos de Marcos Juárez, Federico Bainotti, nos comentó acerca de las nuevas medidas que deberán cumplir.
Además, tuvimos la palabra del doctor Leonardo Ayuso, del área de Salud de la Municipalidad, que nos comentó acerca de las últimas novedades con respecto a esta problemática que ocurre en la ciudad.
Con cambios en la normativa nacional, los conductores de camiones y vehículos de emergencia deben cumplir nuevos requisitos que implican más tiempo, dinero y traslados. Por ello, tal como detalló Ayuso, el municipio está gestionando alternativas locales para reducir el impacto.
Los cambios en la Licencia Nacional de Conducir afectan directamente a choferes profesionales y bomberos voluntarios de Marcos Juárez, que ahora deben cumplir con los mismos requisitos que un transportista.
Esto incluye el curso teórico, simulador de manejo y un riguroso examen psicofísico, lo que ha generado complicaciones logísticas y económicas en la ciudad. Uno de los puntos más conflictivos es este último, que antes se realizaba en el municipio, y ahora debe hacerse en Villa María, generando traslados obligados.
El municipio está gestionando que vuelva a realizarse localmente con apoyo de tecnología, ante la falta de profesionales disponibles, especialmente oftalmólogos. 
En el caso de los bomberos, según lo detallado por Bainotti, el impacto es aún mayor: deben destinar días laborales y cubrir costos elevados.
El curso teórico tiene un valor de $137.000 por persona, mientras que el examen psicofísico asciende a unos $80.000. A esto se suma el costo del simulador de manejo y traslados.
El circuito completo ronda los $220.000 por persona, entre cursos y exámenes. Con un promedio de 20 choferes activos, el gasto supera los cinco millones de pesos, algo difícil de afrontar para una institución voluntaria.
Todos estos gastos deben ser cubiertos por los propios cuarteles o los trabajadores, sin subsidios directos, lo que genera un fuerte reclamo por soluciones estructurales.
Las autoridades municipales elevaron pedidos a la Agencia Nacional de Seguridad Vial para buscar soluciones. Mientras tanto, se aguarda que a partir de julio habiliten los sistemas administrativos necesarios para volver a prestar estos servicios en Marcos Juárez y aliviar la carga para quienes necesitan esta licencia especial de transportes pesados.