Sorpresa: Latimori candidato

En una asamblea que reunió cincuenta personas, la Unión Vecinal se concentró en su local partidario ubicado en calle Lardizàbal casi esquina Tucumàn, donde en un clima de fervor, se decidió no acompañar como segundos al PJ, dejando establecido que la unidad con los justicialistas es con la UV a la cabeza.

En el mismo sentido surgió el nombre de Horacio Latimori como candidato a juzgar por las encuestas que se manejan y se decidió viajar a Córdoba el dìa jueves 17 de Mayo para llevar la novedad al Dr. Juan Carlos Massei; Ministro de Gobierno y autoridad partidaria justicialista.

La candidatura del Ing. Latimori, sorprende porque lo negó siempre e incluso mostró disconformidad del maltrato Justicialista en la anterior compulsa electoral.

Hoy aparece como muy posible dado que nadie viaja a Córdoba a proponer algo previamente no convencido, y esto va muy en serio porque los peronistas están preocupados de los trascendidos donde además se dice que aceptan la oferta vecinal caso contrario van solos e incluso amenazan con acordar en el peor de los casos con el PRO.

Se estima que esto último es una amenaza para inducir la aceptación del liderazgo vecinalista, pero se da por seguro que la Asamblea marcó una clara definición de la militancia “dura” de la UV, cuyo argumento central es la pérdida definitiva de la identidad si aceptan la prioridad del PJ.

Con este escenario, la duda es que hará el PJ de Marcos Juàrez, con sus 5.000 votos como bandera, su brillante elección última y una serie de pergaminos que de pronto vuelan por el aire y replantean todo el futuro.

Muchos cercanos al peronismo vaticinan una claudicación ordenada desde Córdoba y ceñida a los números de las encuestas, resta saber que le dejarà la UV a los justicialistas de Marcos Juàrez.  Si manejamos antecedentes, seguramente muy poco, pese al último resultado local. Faltaría conocer si todo el cuadro pejotista baja la cabeza y obedece o finalmente algunos se van a su casa sin aportar.

El PJ local tiene una larga historia de obediencia y desencanto que puede llegar a repetirse.

Nelvio Barovero.-